¿Qué es el ralentí?

El ralentí es un concepto que tiene un uso, a veces, gracioso. En muchas ocasiones, se ‘sabe’ lo que es el ralentí, pero no se tiene la facilidad para describir lo que es. Esto implica claramente que no tenemos profundizado el concepto. Súper importante si quieres obtener tu carnet de coche.

Definición técnica y práctica de lo que es el ralentí

El ralentí es la capacidad que tiene el motor de funcionar por inercia, sin que tengamos que pisar el acelerador. Dicho de otra manera, se le suele denominar como régimen mínimo de giro del motor para que se mantenga en funcionamiento sin ayudas externas.

Se da cuando el motor está en punto muerto y el coche puede mantenerse así hasta que se le agote todo el combustible. Ese funcionamiento ‘por sí mismo’ del motor cuando lo encendemos es lo que se denomina ralentí y, de hecho, nos puede incluso advertir de averías.

¿Qué sucede cuando está activo el sistema?

Un coche en ralentí no puede moverse, básicamente porque funciona en punto muerto, sin marchas, sin acelerador y, en definitiva, sin ningún tipo de ayuda aparte de su propio mecanismo.

Si bien cuando activamos lo que es el ralentí del coche no podemos acelerar, también lo es que mientras está encendido pone en marcha muchas funciones de nuestro vehículo como el sistema eléctrico, de lubricación y refrigeración.

¿Cuáles son las revoluciones normales de un coche en ralentí?

El régimen mínimo de revoluciones necesarias para mantener un coche en ralentí comprende un rango de entre 700 y 1300 rpm. Aunque cabe resaltar que esto depende del tipo de vehículo.

En un autobús, por ejemplo, este régimen puede estar en menos de la mitad del máximo mencionado de revoluciones por minuto. (Menos de 600 rpm).

Otros factores que influyen en las revoluciones que son necesarias para el funcionamiento de este sistema de ralentí es el estado del motor -frío o caliente- de manera que entre más baja sea la temperatura, más revoluciones harán falta para mantenerlo en este estado.

También influyen los sistemas que tengamos activados en el coche, como puede ser la radio, por poner un ejemplo.

Averías detectadas a través del ralentí

Lo normal es encontrarse todos los días con el mismo ralentí, que no hace falta que estemos mirando constantemente, aunque nos sea posible hacerlo con claridad. El ruido se nos hará familiar y nos alertará automáticamente de algo que no va del todo bien.

El ruido podría ser más alto o más bajo de lo habitual. Veamos algunos ejemplos:

Si notamos que el ralentí va perdiendo fuerza poco a poco, es posible que la válvula del sistema esté sucia y haya que tratarla. En este caso, el coche poco a poco irá disminuyendo las revoluciones por minuto hasta que se cale.

Ojo, puede que no sea exactamente el ralentí lo que esté causando problemas. Si notamos que éste varía de forma descontrolada, quizás la causa se encuentre en los sensores que detectan la posición del propio acelerador.

De notar variaciones en lo que es el ralentí de nuestro coche, en cualquier caso, tendremos que visitar un taller.

En caso de avería en mitad de un viaje, no dudes en acudir a nuestro servicio de asistencia en carretera para que te ayude allá donde estés.

¿Ahorro gasolina si voy en el régimen mínimo de rpm?

Sí, efectivamente. Cuando el coche está en punto muerto funciona con las revoluciones más bajas y al no pisar el acelerador, el coche no consume. Sin embargo, te adelantamos que no es, ni de lejos, lo recomendado. El coste de esta práctica puede llegar a ser mil veces más cara que la gasolina o el gasoil, porque expone de forma directa la estabilidad y seguridad de tu vehículo.