Te contamos las principales distracciones al volante que hay y cómo evitarlas
La vida es el bien más preciado que todo ser vivo tiene y, por tanto, hay que cuidarla y protegerla en todo momento, evitando ponerla en riesgo.
Cuando conducimos, ya sea en coche o en moto, todos estamos expuestos a sufrir accidentes, por lo que es importantísimo que estemos pendientes de la carretera, concentrados en todo momento en la conducción y, por supuesto, evitar todas las distracciones al volante que podamos.
Según la DGT, las distracciones son la causa de más del 30% de los accidentes que ocurren en carretera, así que como buen conductor que quieres ser, debes aprender a identificarlas para evitarlas a toda costa.
A continuación te lo explicamos todo en más detalle. ¡Pon primera y empecemos el viaje!
El uso del teléfono móvil
El móvil nos permite estar conectados y localizados en todo momento y, aunque eso pueda ser bueno, también puede suponer un riesgo en la conducción. Y es que su uso es, sin duda, una de las principales distracciones al volante que, además, está penada con multa y pérdida de puntos del carnet. Más concretamente, una multa de 200 euros y la pérdida de 6 puntos del carnet.
Para poder hablar por teléfono mientras se conduce y evitar sufrir un accidente, es obligatorio instalar un manos libre, aunque tampoco es muy recomendable hablar mientras se conduce pues se pierde la concentración, llevando a aumentar el tiempo de reacción.
Así que nada de llamadas ni mensajes mientras estés conduciendo. Prevenir es siempre mejor.
Comer o beber al volante
Para una buena conducción, las dos manos deben ir al volante, ambas, así que comer o beber mientras estamos en carretera, puede ser un verdadero peligro.
La multa por comer conduciendo puede ser de entre 80 a 200 euros, dependiendo de si al hacerlo la negligencia al volante es más o menos elevada.
Así que si tienes hambre mientras conduces, no lo dudes, para, descansa, bebe y come y continúa tu camino.
Fumar
Otra de las grandes distracciones al volante es fumar mientras se está en marcha. Y no es cuestión solo de fumar, sino del acto de encenderlo, apagarlo, que salte ceniza caliente y nos quememos, que se queme el coche… Todo ello hace que estemos más pendientes del cigarro, y todo lo que pueda pasar con él, que de la propia conducción, y eso es sin duda un gran riesgo.
Así que no hay viaje tan largo como para que un fumador no pueda esperar a bajar del coche y, en el caso de que sea así, recuerda que es recomendable hacer paradas cada dos horas para descansar y estirar las piernas, así que aprovecha ese momento para fumar si es que así lo quieres.
Maquillarse
Cuántas veces no se ve a personas aprovechando los semáforos para maquillarse… y qué peligroso es hacerlo mientras se está conduciendo. Ya no solo para uno mismo, sino para el resto de usuarios.
Así que es preferible evitar un accidente y levantarse un poquito antes, maquillarse y hacer todo lo que sea necesario antes de subir al vehículo. Y si tienes que retocarte antes de llegar al lugar, para en un sitio adecuado, retócate y continúa hasta tu destino.
Además, la multa por maquillarse en el coche puede llegar a ser de hasta 500 euros y la pérdida de 6 puntos del carnet.
Sin duda, es una distracción al volante que es fácil de evitar.
El copiloto es importante
Cuando vamos conduciendo y estamos acompañados, es normal que se tengan conversaciones. Es una buena forma de hacer el viaje más ameno y placentero. Pero siempre, siempre, siempre, es importante mantener la vista en la carretera y mantener la concentración.
Hay que evitar discusiones al volante, así que el copiloto debe ayudarnos a mediar con los conflictos que pudieran surgir y, por supuesto, no originarlos él.
Conducir con sueño
Otra de las distracciones al volante más peligrosas es conducir con sueño. Y puede ser realmente peligroso hacerlo porque nos podemos dormir y tener o causar un gran accidente. Por ello, si no has podido descansar bien y tienes sueño, intenta retrasar el viaje y si el sueño te viene cuando ya estás conduciendo, para en un lugar adecuado, descansa un rato hasta que estés mejor, refréscate y cuando ya no tengas sueño, continúa tu viaje.
Como ves, existen muchas distracciones al volante que se pueden evitar. Así que procura que siempre que vayas a conducir estés en perfectas condiciones para hacerlo.